jueves, 20 de junio de 2013

Cerrando una etapa, abriendo otra

Me gustaría subtitular esta entrada de otra manera:

"El niño modelo"

Acabamos un ciclo en el colegio, el ciclo de infantil.


Durante estos tres años he visto como crecía en todos los sentidos mi hijo. El primer día de colegio llegué con un niño que empezaba a dejar de ser bebé y hoy siento que nos despedimos de las aulas de infantil con un niño que empieza a dejar de serlo para convertirse en un chaval.


Este último curso el cambio, el desarrollo ha sido aún más intenso en todos los aspectos. No solo era un curso "especial", con el punto de mira puesto casi en el paso a primaria. Ellos eran también los mayores del ciclo, los mayores del patio, los mayores. Y se ha notado. Al menos yo lo he notado. Este curso ha sido algo más complejo que los anteriores.


Las mamás veteranas me hablan de una crisis por la edad: "son los seis años". Y asiento pensando debe ser... ese querer crecer y ser mayor con todas sus ventajas y ese querer seguir como estoy, siendo pequeño, cerca de mamá, en terreno conocido y seguro, sin prisas, sin pegas, sin responsabilidades ni autonomías mayores.


En nuestro caso puedo hablar de: nerviosismo, inquietud, mal genio.... mucha mucha mucha intensidad en su forma de ser y actuar. A veces he pensado: "este no es mi hijo", "él no es así, está así". ¿No lo es? está cambiando continuamente, crece, desarrolla su propia personalidad. ¿Ya no es un niño modelo? ¿Qué es un niño modelo? ¿Modelo para quien, en base a qué? ¿Por qué ha dejado de serlo, porque discute, porque protesta, porque muestra su desacuerdo, sus preferencias? ¿hasta donde pedirle esa obediencia pedida que le exijo, para sus mayores, para sus padres, para sus profesores?

1 comentario:

  1. Nuestras vidas siguen ritmos paralelos.

    No sé si leíste lo que publiqué en la comunidad esta semana en el apartado de niños, pero se parece bastante.

    Nuestros peques se hacen grandes y nos esperan nuevos retos. Pero sabremos estar ahí :)

    Un abrazo.

    ResponderEliminar