Amanece nevado.
No es demasiado pero sí lo suficiente... ha cuajado.
Piratilla1 salta emocionado mirando tras los cristales de la ventana. -"Bien, bien, bien. ¡Muñeco de nieve! voy a hacer un muñeco de nieve!".
-"Hijo, hay que ir al cole, a la tarde si sigue la nieve juegas un rato en el parque." (Rezando para que no quede arrasado por manos infantiles antes de las cinco, dado que por las bajas temperaturas tienes claro que la nieve se helará en vez de fundirse).
-"¡Noooooooooooooooo! No quiero ir al cole. ¿Y cuando voy a hacer bolas de nieve?"
- "venga, que hacemos alguna por el camino".
'¡Craso error!, ¡cómo pudiste ángel candido!
Como siempre vas con el tiempo justo, más hoy que no tienes ganas de estar congelándote esperando, como se congela él (Piratilla1) haciendo la cola, mientras Piratilla2 se ha convertido en un muñeco Michelin embutido en un invernadero (que es lo que parece su silla con el plástico de lluvia).
Al salir, recuerdas la tormenta de nieve y viento que os pilló inmisericorde a las nueve menos diez y a las dos menos diez de la tarde (para recordarte que la ley de Murphy sigue plenamente vigente) y te encomiendas a los dioses invernales. Hoy la nieve, ya en la calle, te da medio respiro y apenas chispea ligeramente. Parece que todo va a ir bien.
Y de repente, al cerrarse la puerta del portal los cinco minutos hasta el cole se convierten en:
-"Ten cuidado, no corras, te vas a resbalar".
-"Espera cuidado, te estás poniendo perdido de nieve con las bolas que quieres hacer".
- "Te estás empapando"
- "Sacude la nieve de los guantes".
-" No arrastres las botas, que te llevas media acera de nieve a clase".
Blablablabla...... tú sudando por llegar, parando cada medio minuto, oyes el tictac del reloj imaginario de tu mente recordándote que no llegas puntual, ves mentalmente la fila entrando..... y Piratilla1 medio metro detrás tuyo, entretenido. Más feliz que una perdiz con su nieve por todas partes.
Llegais (tú con la lengua fuera, él tan tranquilo, el pequeñajas dormido en la silla). Los padres gotean, con los niños, se nota que el mal tiempo revuelve rutinas y te sientes mejor.... ni tan siquiera habeis sido los últimos (fiiiiiiiiiiiiiiuuuuuuu).
Te espera la vuelta. A las dos. Y recuerdas que miraste la previsión del tiempo en internet y anuncian tres días de nevadas... desde el domingo hasta el martes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario